La categoría de bebidas funcionales está en crecimiento, así como también la demanda del consumidor de bebidas de origen vegetal. Con las proteínas de origen vegetal, los productores de diferentes categorías, incluidos los lácteos, pueden aprovechar estas dos tendencias y descubrir oportunidades con nuevos públicos. El desafío está en encontrar el ingrediente que tenga el equilibrio adecuado entre sabor, textura, valor nutricional y flexibilidad. La proteína de girasol podría ser la solución gracias a su flexibilidad natural y la posibilidad de utilizarse en todo, desde bebidas funcionales hasta productos híbridos.
Al contar con muchos ingredientes de origen vegetal, los productores suelen tener que sacrificar al menos una de las características del producto final, como el color, los ingredientes adicionales necesarios para obtener la textura correcta, el equipo esencial para la producción o un perfil de sabor que no cumple del todo con las expectativas del consumidor.
Al utilizar la proteína de girasol se evitan estos problemas y se abre la puerta a múltiples beneficios adicionales. Descubra por qué debería tener en cuenta este ingrediente innovador.
La mayoría de los productores ya cuenta con casi todo, o incluso todo, el equipo necesario para comenzar a trabajar con la proteína de girasol. Lo único que habría que modificar podría ser agregar un tratamiento enzimático en el proceso de mezcla, o subir la presión durante la homogeneización, pero todos estos pequeños ajustes pueden resultar en una mayor variedad de productos, y a la larga, en mejores ganancias.
«En la industria de las bebidas existe la posibilidad de ofrecer productos con proteína de origen vegetal que aportan mayores beneficios», señala Ronnie Kragh Enggaard, líder de Desarrollo de productos para EMEA en Tetra Pak. «Muchas bebidas de origen vegetal actuales tienen poca proteína y casi nada de fibra, y ahí es donde la proteína de girasol ofrece la posibilidad de crear algo distinto con un proceso fácil de implementar».
La proteína de girasol tiene sabor neutro con un toque a nuez y es de color hueso. Es por eso que se puede usar en todo, desde café helado hasta yogurt. Además, la dosificación es flexible, entre 2 % y 7 %, para adaptar la receta a cada producto.
También cuenta con flexibilidad a nivel más general, es decir, se puede usar como base para bebidas funcionales de origen vegetal o como complemento en un producto lácteo para crear una opción híbrida con propiedades únicas.
«La flexibilidad de la proteína de girasol hace que los productos conquisten a todo tipo de consumidores», explica Enggaard. «Por ejemplo, los productos de origen vegetal suelen considerarse de calidad superior en Europa, entonces, este ingrediente se podría usar tranquilamente para una bebida de origen vegetal de calidad superior. Por otro lado, es una proteína más barata que las alternativas lácteas, lo que permite crear un producto híbrido que sea nutritivo por un precio más bajo».
Con 50 % de proteína, 21 % de fibra y una variedad de vitaminas y antioxidantes, la proteína de girasol tiene un perfil nutricional ideal para aportar beneficios funcionales reales. Se vuelve aún más tentador cuando el 74 % de las personas buscan productos con beneficios para la salud1 y el 88 % están dispuestos a pagar más por productos saludables2.
Esto significa que no solo es un ingrediente ideal para las bebidas funcionales, si no que también se puede añadir a otros productos para ofrecer beneficios funcionales, como cantidades naturales de fibra.
«El hecho de poder ofrecer fibras naturales y buen contenido proteico en productos de origen vegetal es bueno para los consumidores que se preocupan por la salud», indicó Enggaard, «y le permite a los productores ofrecer algo innovador. Para que el contenido de fibra sea suficiente, se debe alcanzar cierta dosis, y con la proteína de girasol esto es fácil de lograr».
Para que los beneficios nutricionales sean reales, el contenido nutritivo se debe poder absorber de manera efectiva. La absorción de proteína de algunos ingredientes puede ser muy baja, pero en el caso de la proteína de girasol, el cuerpo absorbe el 98 %, es decir, cada 100 g de proteína, el cuerpo absorbe 98 g.
La digestibilidad es importante, pero sin un sabor y textura atractivos para los consumidores, el producto no tendrá éxito. Gracias a su textura suave y sabor algo neutro, la proteína de girasol es óptima para muchos productos, ya que permite añadirle sabores como vainilla, fresa o chocolate sin que se sienta mucho el sabor de la proteína.
Algunas proteínas requieren procesos químicos para generar el polvo, o al menos procesos de humectación, calentamiento y secado, que pueden consumir mucha energía. En cambio, el proceso para elaborar el polvo de proteína de girasol es limpio, mecánico y no requiere químicos adicionales. Este método es energéticamente eficiente con bajas emisiones de carbono y bajo consumo de agua y también asegura que el producto final mantenga una calidad constante. Este simple proceso de producción, junto con la facilidad para cultivar y mantener los girasoles, también hace que sea un ingrediente accesible.
Con la creciente demanda y la mayor disposición de los consumidores para probar nuevos productos de origen vegetal e híbridos, es el momento ideal para desarrollar productos innovadores con proteína de girasol. Lo mejor de todo es que comenzar es sencillo y te acompañaremos en cada paso.
1) Encuesta cuantitativa sobre salud y nutrición de Ipsos para Tetra Pak, 2023 (Brasil, EE. UU., China, India, Corea del Sur, Kenia, Sudáfrica, Alemania, España, Reino Unido)
2) Encuesta global de salud y bienestar de Nielsen, 2015. CleanEating WGSN, 2016